Las costas de Quintana Roo han sido colocadas desde Puerto Morelos hasta Mahahual con la finalidad de proteger del recale el mayor porcentaje de costas, centros de hospedajes contratan hasta 300 trabajadores para labores de recolección en la temporada y el volumen más importante de esta macroalga se espera en los meses de junio, julio y agosto.

Y es que precisamente con la finalidad de estar preparados para esta situación y evitar que impacte en las zonas de playas, desde hacer varios meses los hoteleros afinaron estrategias con la Región Naval y se empezaron a colocar las vallas antisargazo desde Puerto Morelos hacia Mahahual, en la que cada hotel se programa de acuerdo al comportamiento del sargazo, ya estas mallas lo que se hace, es reducir significativamente la arribazón a la playa.

La principal preocupación del sector turístico, es que el arribo de esta macroalga afecte la llegada de turistas en la siguiente temporada alta en la que ya se tiene niveles de reservación superiores al 50% especialmente de turismo nacional que ha programado sus vacaciones de verano en los diferentes destinos del Caibe Mexicano.

La industria hotelera ha dado a conocer, que se han hecho varias propuestas a las autoridades y en esta época a las candidatas y candidatos, sobre varios puntos: el primero es considerar que el presupuesto de los estados se de un acuerdo a la población que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) establece, cuando tendría que flexibilizarse ese concepto o contemplar un aspecto importante en los estados que son turísticos.

Con la temporada de sargazo los hoteles llegan a contratar hasta 300 personas exclusivamente para los trabajos de recolección de sargazo, por lo que este año confían en que las autoridades coloquen correctamente las barreras y pongan a funcionar los barcos sargaceros, para que sea menos el alga que recale en las playas.

Cabe señalar que este año se esperan un desplazamiento hacia el caribe de 400 mil y 500 mil toneladas de las que 200 mil a 250 mil están recalando en las costas del caribe y se mantiene bajo monitoreo entre 12 mil y 15 mil millones de toneladas flotando entre el océano atlántico central y el mar caribe.

 

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